Pirámides, templos y estrellas
Juan Antonio Belmonte Avilés / Crítica
Este libro ofrece los frutos de un riguroso y completo
estudio sobre una de las civilizaciones más imponentes y avanzadas de la
antigüedad, Egipto. Trata con especial atención la arqueoastronomía, una
disciplina basada en el estudio de la disposición de estructuras creadas por el
hombre respecto a los astros y la relación entre ambos, hilando cada teoría a
partir de los siempre atractivos jeroglíficos, tablas y otras superficies en
las que el pueblo del Nilo dejó grabados sus conocimientos. Partiendo de los
orígenes de esta cultura, en sus páginas nos embarcamos en un viaje por el
tiempo y la geografía, acercándonos a lo que esta conexión entre la obra humana
y la estructura celeste realmente supusieron para los egipcios.
Belmonte, investigador del Instituto de Astrofísica de
Canarias pone a nuestra disposición información sobre calendarios y fotografías
de los lugares de los que habla, algunos de ellos visitados en persona por él
mismo, entre otras muchas cosas. Estas consisten por ejemplo en el método con
el cual se puede averiguar la verdadera fecha de construcción de un edificio o
estructura, ayudados por las reglas que sostienen la astroarqueonomía,
distintas generaciones y estirpes de la nobleza egipcia y su impacto en la
época y la sociedad, o descodificaciones realizadas de antiguos textos hititas.
Desde un punto de vista científico se
busca resolver todo tipo de dudas referentes a la disciplina que une los
monumentos terrestres con los astros, recordemos el “como es arriba es abajo”,
y describir aspectos de gran importancia como la creación del calendario, que
supuso un gran cambio para todos.
Esta obra, cuyo estudio se sitúa a finales del período
amárnico, habla también de la época de las Grandes Pirámides, cuando se
construyó la primera y única maravilla del mundo visible en la actualidad.
Presenta teorías propias y de otros autores, valorando sus pros y contras,
contrastando información de un extenso número de fuentes para aportar la
información más completa y veraz posible. Las tablas, ilustraciones, planos y
diagramas que acompañan muchas de las páginas, contribuyen a una mayor
comprensión de lo explicado en ellas.
En lo referente a las pirámides, por ejemplo, se cita
quiénes fueron sus constructores, a quienes albergaban en su interior si es que
lo hacían, su propósito, y detalles como el ángulo de inclinación de sus
paredes, la relación que este hecho tiene con los astros, el momento social y
político que atravesaba el antiguo Egipto cuando se hicieron, o la incidencia
de la luz sobre los monumentos, que en ocasiones son pistas destinadas a guiar
a quien las observa hacia nuevos caminos y sorpresas en las estructuras de una
civilización que a pesar de haber florecido tres mil años antes que la nuestra
gozó de unos conocimientos y tecnología admirables.